¿Es el TLCAN un estímulo para las Industrias Culturales y Creativas?
/
Para este economista experto en el tema de las llamadas industrias creativas, no debemos elegir los extremos ni casarnos con un tratamiento específico de la cultura. Una mezcla entre el proteccionismo franco-canadiense y el liberalismo anglo-alemán podría ser la que beneficie en mayor medida al sector cultural mexicano
/
POR ERNESTO PIEDRAS
/
Hoy partimos del reconocimiento de que la cultura y la creatividad juegan un papel importante en la economía del país. Se ha comprobado en reiteradas ocasiones que el sector cultural, además de representar los elementos espirituales y estéticos que lo caracterizan, es un elemento clave para el desarrollo económico y social del país. El sector se conforma por unidades productoras de bienes y servicios culturales que generan 3.66% de los empleos totales y contribuyen con 7.4% al Producto Interno Bruto (PIB) del país. La importancia del sector, a su vez, se refleja con la balanza comercial de bienes y servicios culturales superavitaria, gracias a importantes acuerdos con los que cuenta México como el TLCAN y acuerdos con la Comunidad Europea.
/
En los últimos años se ha observado una expansión del comercio de bienes y servicios culturales, duplicando su crecimiento en menos de una década, mientras que el comercio a nivel global aumentó a una tasa media de crecimiento de 8.8%.1 La acelerada globalización, la constante innovación en Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) y el aumento en la firma de tratados de libre comercio, entre otros factores, han influido en el crecimiento del comercio internacional de bienes culturales compartiendo exponencialmente la diversidad cultural y el talento creativo de millones de mexicanos alrededor del mundo.
/
El comercio internacional de las ICC en cifras
Las Industrias Culturales y Creativas (ICC) representan 7.6% de las importaciones y el 12.5% de las exportaciones. Esto pone a México en una balanza comercial positiva: es decir que exporta más de lo que importa del mundo. El superávit comercial general por las ICC representa 18.9% de las Inversiones Extranjeras Directas (IED) en México, lo cual equivale a 88% de los ingresos generados por el turismo internacional. Sin duda, las ICC constituyen un importante generador de divisas vía el intercambio comercial y tienen efectos multiplicadores en la economía. Demuestran que el comercio de bienes creativos es un importante ingreso para el país así como una fuente de empleo, de servicios y de bienestar social.
/
Entre los efectos de corto plazo de la firma del TLCAN se observó que las importaciones tuvieron un crecimiento de 5,234 millones de dólares en 1997 a 8,644 millones de dólares en el año 2000 y las exportaciones de 11,581 millones de dólares en 1997 a 21,372 millones de dólares en el 2000, respectivamente, demostrando el efecto de la apertura comercial en el sector cultural. Durante la primera década, esa característica de balanza comercial superavitaria se mantuvo entre México y los países signatarios del TLCAN.
/
Al analizar específicamente las relaciones comerciales culturales con Estados Unidos, se observa que desde 2009 las importaciones mexicanas de bienes culturales han seguido una tendencia creciente, al tiempo que se mantuvo una tendencia constante en exportaciones.2
/
Comercio internacional de bienes culturales y creativos Estados Unidos-México
Para ejemplificar los beneficios que ha traído la integración regional a las industrias creativas se puede analizar a la industria editorial. Estados Unidos continúa siendo el principal socio comercial de México en esta industria. La eliminación de aranceles y barreras al comercio entre estos países ha aumentado el intercambio y la variedad de productos de índole editorial en ambos países, fenómeno que se replica en otros sectores de las ICC. La mitad de las exportaciones mexicanas atienden el mercado estadounidense representando 85 millones de dólares, con el paso de las exportaciones hacia Estados Unidos han aumentado y hoy representan casi 50% del total.
/
Si bien las cifras superavitarias reflejan las ventajas comparativas que teníamos con nuestros vecinos del norte en aquellos años. Dicho tratado tuvo implicaciones pues a partir de su entrada en vigor la sociedad se transformó profundamente mediante la integración económica con Canadá y Estados Unidos. En el terreno de la cultura se han realizado una serie de iniciativas legales que lograron reforzar, promulgar y ampliar la protección de las patentes y los derechos de autor para proteger las grabaciones de sonido, por mencionar algunos ejemplos.
/
Si bien hace 25 años se planteó el TLCAN bajo los estándares internacionales de comercio, respetando algunos de los convenios en materia de derechos de autor, en el tratado existen algunas excepciones respecto al tratamiento que se la da a los derechos de autor. Por un lado, Estados Unidos y México abrieron su mercado y se
mantuvo un flujo importante de comercio tanto en bienes y servicios culturales como en los bienes tradicionalmente comercializados. Canadá, por su parte, fue el único de los tres que dejó fuera del tratado ciertas cuestiones culturales, incluyendo los derechos de autor.
/
No debemos elegir los extremos ni casarnos con un tratamiento específico de la cultura. Pues por un lado tenemos el proteccionismo al estilo franco-canadiense y por el otro, el liberalismo anglo-alemán. Una mezcla de ambas estrategias comerciales podría ser la que beneficie en mayor medida al sector cultural mexicano, dejando que el flujo de bienes sea constante en el marco de la protección a la propiedad intelectual y los derechos de autor. México debe buscar ser un país con intercambios intensivos en este sector tanto en la apropiación como en la exportación de nuestros bienes y servicios culturales siempre y cuando se mantenga la protección de los mismos. Debate que está siendo atendido tanto por la Secretaría de Cultura junto con la Secretaría de Economía e invitan a un mayor involucramiento de Proméxico y Bancomext.
/
Cabe enfatizar que los bienes y servicios culturales no deben de tener el mismo tratamiento que los demás mercancías tradicionalmente comerciadas; sin embargo, éstos son sujetos de un intercambio comercial que debemos de fortalecer para mantener la relación comercial con el bloque de América del Norte. Sin lugar a dudas el actual entorno político a nivel internacional presenta un nuevo reto en términos de política comercial. La globalización y la nueva economía electrónica han transformado las cadenas productivas y permiten intercambios instantáneos de información que no sólo involucran términos económicos y cambios importantes en los supuestos iniciales de los tratados internacionales, sino que también afectan la política, la tecnología y la cultura que deben de ser tomados en cuenta en la renegociación del TLCAN.
/
Dicha renegociación deberá también incluir vías para promover las exportaciones de bienes y servicios culturales, pero al mismo tiempo fortalecer el desempeño del sector al interior del país, facilitando el intercambio de insumos creativos y la colaboración entre creadores sin importar fronteras. Con ello se logrará vigorizar la planta productiva nacional y la creación de empleos bien remunerados.
/
ILUSTRACIÓN: EKO
/
NOTAS:
1 Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Informe sobre la Economía Creativa. Disponible en: http://www.unesco.org/culture/pdf/creative-economy-report-2013-es.pdf [consultado el 3 de noviembre de 2017]
2 Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, Disponible en http://unctad.org/en/Pages/statistics.aspx
« En defensa de la soberanía cultural Mitos y mentadas del sector cultural en el TLCAN »