La vuelta a la LIX Muestra en 14 mundos
POR JORGE AYALA BLANCO
1.- El mundo de Las elegidas de David Pablos (México) es el mundo de la denuncia visibilizadora de la trata de mujeres y la sexclavitud consecuente, mundo autosaboteado que equilibra el punto de vista de las víctimas con el de las invencibles familias de padrotes superorganizados, mundo que enrarece imágenes del cine japonés clásico para intentar decir oblicuamente otra cosa pero defraudándolas con secuencias de suspenso convencional e incluso con una alternativa fuga imaginaria mal bifurcada, mundo inconsolable del proceso de vulneración de una historia de amor vencida de antemano.
2.- El mundo de Mustang: belleza salvaje de la francotomana rara avis Deniz Gamze Ergüyen (Turquía) es el mundo enclaustrado de la tradicional opresión femenina islámica, mundo al que le bastan los divergentes destinos maritales o suicidas o desertores de 5 Mujercitas huérfanas rurales para abarcar toda variación vivencial posible del tema, mundo de la supersensitiva rebeldía infantil, mundo de la esperanza en una ilusoria ruptura liberadora con sólo huir hacia la casa de una profa emancipada en Estambul.
3.- El mundo de Saint Laurent de Bertrand Bonello (Francia) es el mundo de la fantasía biográfica parcial que se basa sin mácula explicativa en el gran espectáculo de la creatividad y la decadencia en estado puro, mundo del delirio de la alta costura morigerado por un arrollador glamour de época que transfigura el sexo mórbido y las drogas degradantes y el rocanrol, mundo de la autodestrucción y el envejecimiento patéticos que se tornan exasperantes y exasperados para mejor perpetuarse en la memoria colectiva.
4.- El mundo de Carneros de Grímur Hákonarson (Islandia) es el mundo del rencor vivo en la inmensidad de los espacios helados antiwesternistas, mundo esculpido en el fragor de los cuerpos fraternos rumbo al vértigo metafísico del abrazo desnudo que devuelve a la existencia fetal y verdadera.
5.- El mundo de Nuestra pequeña hermana de Hirokazu Kore-eda (Japón) es el mundo de una hipersensitiva crónica familiar que viaja desde la miniescandalosa alcoba de la primera libremente sexualizada de las tres hijas legítimas del difunto padre abandonador hasta la playa de la aceptación integradora de la dulce hermanastra ilegítima, mundo de melancólicas armonías clásicas en el tranquilo flujo cotidiano de un núcleo íntimo que rompe con traumas y rencores ancestrales.
6.- El mundo de Murieron por encima de sus posibilidades de Isaki Lacuesta (España) es el mundo de un autoexcitado manicomio de Atrapados sin salida reivindicadoramente vuelto contra los responsables de la crisis económica hispana, mundo de un esperpento fallido con caos prefabricados subDe la Iglesia creyéndose Relatos salvajes en baturra versión bestia.
7.- El mundo de Mi madre de Nanni Moretti (Italia) es el mundo de la imparable crisis semilúdica de una cineasta profundamente afectada por la muerte de la madre a lo Pialat, mundo de la invención histriónica/curativa de un doble fantasmal que mucho tiene del distanciamiento brechtiano de uno mismo pero también del yo dividido de Laing y del esquizoanálisis de Deleuze-Guattari en acto.
8.- El mundo de El club de Pedro Larraín (Chile) es el mundo de los ruines reacomodos internos de una autosuficiente prisión-guarida para curas pederastas en cierta mortecina región austral con galgódromo y berreante loquito-chivo expiatorio a la puerta, mundo tremebundo de un verborrágico salmo penitenciario en carne viva (y molida), mundo anacronizante del sexo como culpa y crimen y castigo y remordimiento eternos.
9.- El mundo de Eisenstein en Guanajuato de Peter Greenaway (Holanda) es el mundo congestionado de un ¡Qué viva Eisenstein! chocarrero y jodorowskiano desatado al incitante calor del pintoresco trópico mexicano ebrio de culto funeral, mundo del bombardeo de un dropping names a pantalla triple y subliminalidades exacerbadas entre cierto sordiciego campanero aborigen con plumas e inquietas momias ¿ya autobiográficas?, mundo paródico del exotismo hastiante con gratuita vomitona en la calle subterránea y desvirgación homosexual como rito azteca y magno desfile disminuido del otrora Día de Muertos (ahora Día de San Spectre) y supercursi renuncia al triángulo amoroso con Maya Zapata y Carmín tropical en persona.
10.- El mundo de Las montañas deben partir de Jia Zhang-Ke (China) es el mundo desazonante de una saga antirromántica de las nuevas generaciones pan-chinas sustancialmente deshechas por el desarraigo de la emigración total (lingüística, cultural, axiológica) hacia ese futuro del 2025 que es Australia hoy, mundo-lastre de las indestructibles relaciones consanguíneas que perduran y gobiernan desde el inconsciente.
11.- El mundo de 3 corazones de Benoît Jacquot (Francia) es el mundo de una gloriosa deriva relacional nocturna que se convierte en diurno trueque de las figuras esenciales, mundo del amor a primera vista vuelto misteriosa experiencia de los límites y agonía del mito del amor-pasión en un desesperado clandestinaje cardiaco.
12.- El mundo de 45 años de Andrew Harrogate (RU) es el mundo de la desestabilización sentimental en la vejez estéril a causa de secretos y mentiras pretéritas, mundo de las pequeñas inmensas emociones en la pareja y las socavadoras minucias ya imperdonables.
13.- El mundo de Una paloma reflexiona sobre la existencia en una rama de Roy Andersson (Suecia) es el mundo inane de unas atónitas viñetas-tableaux vivants de perdedores y encuentros con la muerte y tiempo sincrético de soldados epocales irrumpiendo en la cafetería, mundo petrificado de un humor absurdo postsurrealista-posMonty Python que revela los ácidos sinsentidos de tu patética cotidianidad seudocivilizada inherentemente cruel.
14.- El mundo de Steve Jobs de Danny Boyle (EU) es el mundo histórico-épico computacional que apenas da para 3 traidores lanzamientos (iMac/NeXT/iPod) que son discusiones farragosas, mundo de una magnate miseria afectiva vuelta asunción abyecta de la paternidad.
*FOTO: La LIX Muestra Internacional de Cine estará en cartelera durante las próximas semanas en el circuito comercial de la Ciudad de México. En la imagen, fotograma de la película Mustang, dirigida por Deniz Gamze Ergüven/Especial.
« Todos los caminos conducen a Tijuana Una apuesta a todo o nada »