Más allá de Zona Maco

Feb 9 • Conexiones, destacamos, principales • 4314 Views • No hay comentarios en Más allá de Zona Maco

Ferias, galerías y los circuitos independientes enriquecieron las opciones para los interesados en las artes visuales en la Ciudad de México, más allá de Zona Maco

/

/

POR SANDRA SÁNCHEZ 

Estoy con la artista canadiense Ambera Wellmann en Lulu, un espacio independiente ubicado muy cerca de la casa en donde se filmó Roma, de Alfonso Cuarón. Visitar Lulu garantiza ver obras de arte contemporáneo interesantes y propositivas, las cuales son elegidas por el curador y escritor Chris Sharp, quien dirige el espacio con el artista Martín Soto Climent. Ante la monumentalidad de galerías, museos y ferias de arte, Lulu mantiene una intimidad explícita: las exposiciones tienen lugar en una accesoria y un cuarto que forma parte de la casa, la cual guarda un parecido con las escaleras y el cuarto de Cleo, la protagonista de Roma. Las obras de arte en Lulu demandan que los cuerpos se acerquen a una distancia tan estrecha que escandalizaría a cualquier guardia de museo. Ambera me dice que éste es sin duda el mejor lugar para exponer.

 

In media res es el título de la muestra compuesta por siete pinturas en las que el cuerpo es el protagonista. Tres en la accesoria convertida en cubo blanco y cuatro más en el cuarto de atrás. Al estar frente a frente con las pinturas los visitantes se sorprenden. Mi sospecha es que entre los desnudos difuminados encontramos al deseo mismo, no su representación sino su presencia pictórica. Las pinturas en Lulu tienen un parecido con las del afamado artista Francis Bacon, a quien el filósofo francés Gilles Deleuze dedicó un libro titulado Lógica de la sensación; sin embargo, las pinturas de Ambera tienen algo único y nuevo (como todo buen arte). Su pincelada y los espacios que produce a partir del color hacen que los cuerpos aparezcan disueltos y mezclados, oponiéndose a cualquier producción neurótica que busca la unidad dar cuenta de un sentido específico del mundo.

In media res, de Ambera Wellmann. / Cortesía de Lulu

 

Wellmann explica que las pinturas parten siempre de experiencias personales, lo cual no es anecdótico sino significativo, ya que se asume como pintora feminista. Dichas experiencias están atravesadas por el deseo, energía necesaria para comenzar algo. “Después hay otro proceso, las trabajo cien veces, pasan por muchas transformaciones porque estoy buscando algo que no necesariamente puedo articular, que no se ve igual que como lo pensé. La pintura debe encontrarse a ella misma y moverse de la imagen original”, comenta.

 

Las preocupaciones de Ambera por el deseo y el cuerpo son una constante en “la semana del arte”, en la que galerías, espacios independientes y museos inauguran exhibiciones, aprovechando el gran flujo de visitantes nacionales e internacionales que vienen a la Ciudad de México para ver, vender y comprar en las ferias de arte Zona Maco y Material Art Fair.

 

La identidad es otro tema que se repite en las obras. La galería Karen Huber, ubicada en la calle de Bucareli, presenta Toy Boy una exposición individual de la artista mexicana Ana Segovia, también pintora. Segovia es familiar de Fernando de Fuentes, productor de cine mexicano. Por esta razón tiene acceso a un archivo con negativos de diferentes películas. La artista utiliza estos negativos como fuente para hacer sus pinturas. Segovia opera una vuelta de tuerca en el material de archivo: transforma los roles de género o enfatiza la violencia en las relaciones de pareja. Este interés parte de un posicionamiento crítico de su propio genero frente a las políticas de identidad sexual reflejadas en el cine mexicano de la “Época de Oro”. En Kiss it better observamos una cancha de futbol, detrás de la red rota dos hombres con sombrero, botas y jeans se besan apasionadamente. La curadora Andrea Bustillos menciona que Toy Boy es una muestra preocupada tanto por el genero como por la construcción de la imagen en la actualidad.

Kiss it better, de Ana Segovia. / Cortesía de galería Karen Huber.

 

En la colonia San Miguel Chapultepec la galería kurimanzutto está de fiesta. Este año cumple veinte años y festeja con la exposición Esculturas pendientes de Abraham Cruzvillegas. El artista mexicano se define como un “trabajador de la cultura” y nos cuenta que recién se mudo a París para impartir clases en la Escuela Nacional de Bellas Artes en donde juega con sus estudiantes: hace listas de la música que escucharon el día anterior y de las películas que vieron en Netflix. Este cambio modificará su producción, aún no sabe qué va a hacer, pero tiene ganas de algo diferente, por ello piensa que esta exposición es un punto y aparte en su carrera.

 

La palabra identidad es una constante en su discurso; cada uno de los elementos que forman las esculturas, que van de techo a suelo, es relevante en su historia personal y en su relación con México. Las piezas están compuestas por elementos ensamblados que logran un equilibrio a partir de las tensiones que generan entre ellos. Hay canoas del lago de Pátzcuaro, plantas locales de los pedregales de Coyoacán, objetos como guajes y bateas hechos con la técnica de laqueado “maque” que trabajó con maestros artesanos de Michoacán, restos de piezas anteriores expuestas en el Museo Experimental El Eco y materiales provenientes de la remodelación de su casa como vigas, cubetas y varillas. Todos los elementos que integran las esculturas tienen una historia detrás, la historia del propio artista.

Abraham Cruzvillegas. Vista de instalación de esculturas pendientes, kurimanzutto, Ciudad de México, 2019. /Foto: Abigail Enzaldo

 

 

Zona Maco 2019
En la feria de arte contemporáneo más importante del país no hubo cambios significativos. Su sede continúa en Centro Citibanamex; el lugar se divide en diez apartados: Sección general, Nuevas propuestas, Zona Maco sur, Arte moderno, Zona Maco diseño, Zona Maco libros, publicaciones, instituciones, patrocinadores y centros de consumo. Nuevas propuestas y Zona Maco sur presentan obras osadas y con un parámetro de riesgo mayor, algunos de sus artistas son emergentes y sus temas de investigación hablan de problemas actuales. En la sección general disfrutamos de galerías nacionales e internacionales consolidadas y tenemos acceso a obras de artistas de renombre como Cindy Sherman, Gabriel Orozco y Jean-Michel Basquiat. En arte moderno nos seguimos asombrando ante Marc Chagall, Pablo Picasso y Joy Laville.

 

En Zona Maco sur se encuentra la galería RoFa Projects dedicada a la investigación de artistas latinoamericanos. Para Maco presenta al artista chileno Edgar Endress quien desarrolla un cuerpo de trabajo alrededor las formas de representación, dominación y resistencia en la cultura. La pieza El curso del Imperio muestra otra faceta de la identidad; la posibilidad de reconocimiento propio tiene su contrapeso en mecanismos de control pedagógicos por parte del estado y la industria. Endress interviene con figuras geométricas tarjetas comerciales para promover carne producidas en el siglo XIX. Gabriela Rosso, CEO de RoFa Projects, comenta que las escenas de exploración coloridas, utópicas e idealizadas de las tarjetas “también pueden verse desde la perspectiva del orientalismo y la construcción del imperio colonial”. El proyecto toma su nombre de la serie de pinturas de Thomas Cole donde reflexiona sobre las actitudes de la época, cuando muchos vieron la vida agraria y pastoral como la etapa ideal de la civilización humana.

El curso del Imperio, de Edgar Endress. / Cortesía de Rofa Projects

 

En nuevas propuestas Parque Galería exhibe piezas de varios artistas que representa y que abordan de manera explícita el cuerpo y la identidad en México como Lorena Ancona, Noé Martínez, Juan Caloca y María Sosa. Las piezas de María llevan por título 6º Presagio Funesto, Minerva y 6º Presagio Funesto, Silvia. Las esculturas están hechas con pasta de caña de maíz, bordado y tepalcates. El galerista Mauricio Cadena explica que los nombres propios inscritos en las varas de caña son de desaparecidos. Los dos montones verticales rematan con rostros de dos mujeres: Minerva y Silvia.

6o Presagio Funesto, Minerva y 6o Presagio Funesto, Silvia, de María Sosa.

 

Zona Maco libros alberga una propuesta necesaria: Librería el Insulto. Gran parte de su mesa está ocupada por un espejo que tiene pegadas pequeñas fotografías antiguas de desnudos y pornografía. Adolfo y Michelle explican que El Insulto es una plataforma autogestiva dedicada a la conformación de un archivo de cultura sexual en la Ciudad de México. A partir de las estrategias del arte contemporáneo, “el archivo da forma a una librería y editorial que ofrecen un catálogo de objetos y experiencias los cuales permiten el encuentro de diferentes personas y comunidades interesadas en compartir gustos, fomentar las discusiones y ampliar las investigaciones y prácticas de estos temas”. Cuando llegué a la librería me encontré con Melina Gaze, una artista e investigadora feminista que genera proyectos con la sociedad civil. También estaba Eugenio Echeverría quien se encuentra al frente de Culturas Disidentes, un concurso para la investigación y producción interdisciplinaria organizado por el Centro Cultural de España en México y Centro Cultural Border. La convocatoria para la tercera edición está abierta hasta el 3 de marzo (http://www.border.com.mx/culturas-disidentes/).

Librería el Insulto en Zona Maco. / Foto: Sandra Sánchez.

 

Al recorrer Zona Maco uno puede perderse en la discusión del mercado del arte y comentar cómo otra vez una galería trajo un espejo del artista Anish Kapoor (bastante bonito, de acero inoxidable con una franja azul). También podemos aceptar que la mayoría de nosotros no vamos a comprar arte; más bien vamos a recorrer la feria y a detenernos en aquello que llama nuestra atención. Muchos artistas locales van a Maco con sus galerías. Si bien hay algunos galeristas que no están dispuestos a hablar demasiado, los locales tienden a conversar sobre las piezas cuando se les pregunta. El diálogo frente a frente permite que conozcamos más sobre alguna obra que nos llamó la atención o que no comprendemos a primera vista. Como se mencionó en el SITAC XIV, el arte contemporáneo tiende a ir acompañado de un discurso; es interesante saber la historia detrás de las obras, las intenciones del artista y la procedencia de los materiales con los que están construidas las piezas. A partir de ahí podemos generar un juicio propio que va del no me gustó al ¡eso no lo sabía!

 

 

Material Art Fair
Este año se celebra su sexta edición, la cual sucede en un ambiente divertido, en medio de un programa de performance que sucede en distintos puntos del lugar, de publicaciones y de obras de artistas emergentes y de mediana carrera. Material tiene como sede el Frontón México, el cual se transforma en una rampa continua de tres pisos, realizada por el despacho arquitectónico APRDELESP. Desde cualquier punto de la rampa se puede ver lo sucedido en las galerías. El cuerpo y la identidad son constantes en las obras presentadas. Me atrevo a decir que el interés en estos temas parte de luchas que se han desarrollado desde el siglo pasado como el feminismo, los estudios poscoloniales y decoloniales, así como las críticas al sistema económico.

 

Termino este recuento con Bestiario-Capítulo V de la artista mexicana Ana Roldán en la galería Instituto de Visión. La serie está formada por treinta pares de cuadros, en uno hay un dibujo en cera y en el otro su definición. “En la pieza la artista explora el sistema iconológico e iconográfico de Adolfo Best Maugard, intelectual mexicano que propuso códigos de representación democráticos en intelectuales para la creación de una nueva sociedad mexicana post-revolucionaria”, explica el comunicado de la galería.

Bestiario-Capítulo V, de Ana Roldán. / Cortesía Instituto de Visión.

 

Me paro frente a la palabra identidad, la definición comienza con un par de preguntas: “¿Quién soy? ¿Podría ser una persona muy diferente en el futuro?” Estos cuestionamientos son constantes en la producción artística. No importa que se exhiba en un espacio independiente, una galería o una feria. Si bien algunas piezas no presagian el futuro, sí pueden llegar a modificar el presente al introducir propuestas y disidencias en los imaginarios culturales.

 

FOTO: El curso del Imperio, Edgar Endress. /Cortesía de Rofa Projects

« »