El oficio de traductor
En esta serie de artículos, el venezolano Adalber Salas Hernández escribe sobre el trabajo del traductor. En cada uno de ellos da una muestra que el conocimiento enciclopédico y la capacidad analítica con el lenguaje pueden ser compatibles con la brevedad
POR FERNANDA RAMÍREZ
Palabras sin dueño. Variaciones sobre la traducción literaria (Literatura UNAM, 2019) de, Adalber Salas Hernández, expone las problemáticas que han existido a lo largo de la historia en diversas traducciones que han perdurado en la literatura universal.
Él mismo un experimentado traductor, Salas Hernández (Caracas, 1987) problematiza sobre el quehacer de los profesionales de la traducción con varios casos ejemplares sobre la relevancia de esta tarea en el impacto que una obra tiene en su tiempo. Uno de los casos mencionados es la biografía de Cristóbal Colón, escrita por su hijo Fernando entre 1537 y 1539. El manuscrito original en español de Historie del S.D. Fernando Colombo (nelle qualo s’ha particolare, &/ vera relatione della vita, & de fatti dell’Ammiraglio D. Cristoforo Colombo, suo padre, como se publicó en italiano cuarenta años después, continúa perdido.
Otro ejemplo es el de la poesía de san Juan de la Cruz; la primera edición data de 1622, en una traducción al francés y que luego de ocho años fueron publicados en español. Entre las preguntas a las que se enfrenta Salas Hernández están: ¿qué papel juega el traductor ante un texto original? ¿Acaso la traducción traiciona al autor? ¿Las letras dejan de ser fieles al autor? ¿El traductor cambia la historia? En estos ensayos expone su experiencia en la traducción de obras de autores clásicos como Antonin Artaud y Hart Crane, así como de autores contemporáneos, como el trinitense Nicholas Laughlin.
Adalber Salas Hernández también es autor de libros Salvoconducto; La ciencia de las despedidas y de la antología De ningún viaje se vuelve. Ha traducido obras de Marguerite Duras, Antonin Artaud, Charles Wright, Hart Crane, Pascal Quignard, entre otros.