El público extranjero revive a Godzilla: Masaaki Tezuka
POR MAURICIO MATAMOROS DURÁN
Masaaki Tezuka se debate entre dos monstruos, dos grandes figuras del cine japonés: el director Koni Ichikawa y el icónico monstruo de látex Godzilla (Gojira, en japonés). El primero fue un realizador importante que tocó buena parte de los géneros fílmicos, mientras que el segundo es una criatura fílmica que destruyó docenas de veces a Japón en el celuloide.
Con el primero trabajó como asistente de dirección en varios de sus últimos filmes (Koto, 1980; La princesa de la luna / Taketori monogatari, 1987; y Villa de las ocho tumbas / Yatsuhaka-mura, 1996), y a Godzilla lo dirigió en tres de sus últimos filmes en Japón: Godzilla vs Megaguirus: Estrategia de Aniquilación G (Gojira tai Megagirazu G-shometsu Sakusen), Godzilla Vs. Meca-Godzilla (Gojira tai Mekagojira, 2002) y Godzilla: Tokyo S.O.S. (2003).
Tezuka visita México con motivo de una restrospectiva sobre Ichikawa que se presenta en Cineteca Nacional, un cineasta con trayectoria importante, aunque no tan conocido fuera de Japón. Sobre el mismo nos comenta en entrevista: “Con la obra de Ichikawa nos encontramos frente a un cine que presenta muchos temas y variantes; que difícilmente resultaría muy impactante o entretenido, y por eso no se le promovió tanto fuera de Japón como sucedió, por ejemplo, con el cine de Kurosawa, que ha sido muy exitoso en el resto del mundo y se le ha dado mucha promoción porque se trata de un cine muy masculino, y de mucho entretenimiento”.
“Me mencionaba usted a Yasujirō Ozu, un autor cuyo cine es muy humanista y que finalmente es un tema muy grande y fácilmente identificable para los espectadores, por lo cual también fue conocido” continúa Tezuka, “pero creo que para dar a conocer, promover a un realizador, es central tener una clasificación en la cual se le pueda identificar. Y con Ichikawa, pues tenemos cine con muñecos, documental y melodrama, lo cual hace muy complicado su aceptación”.
Tezuka asegura que con Ichikawa lo más valioso que aprendió fue el trabajo arduo. Ser cuidadoso en transmitir de manera sencilla y clara el mensaje de cada historia y también poner mucha atención en el trabajo actoral. Esto en todas las películas, incluyendo las de Godzilla, que son los trabajos por los que la gente lo reconoce en el extranjero.
“La primera vez que vi una película de Godzilla fue a los 7 años, fue tal el impacto que me provocó, que desde entonces decidí que algún día haría esas películas”, explica el realizador. Fue la original de 1954, y la vi en la TV; fue hecha antes de que naciera, y la vi en una televisión pequeña. Como todo sucede casi de noche, no supe bien qué vi, pero me divertí, me impacté y después a los 19 años la vi en la Universidad, y supe la maravilla de era la película”.
Deben ser muchos los directores que en Japón quieren hacer filmes de Godzilla, por lo que no debe de ser muy sencillo definir la dirección de uno de estos filmes y hacer realidad un objetivo que se tenía desde la infancia…
Bueno, en la actualidad, me parece que el cine de kaijus (el cine de monstruos descomunales en Japón) es de bajo perfil en Japón, y el cine de Godzilla lo es aún más; por esa razón fue que no me costó tanto trabajo llevarlo a cabo. Hay muchos directores que prefieren estar sin trabajo a dirigir un filme de Godzilla. Yo no, a mí me encanta Godzilla y hacer una película finalmente es trabajo. Y pues obviamente, en la empresa se enteran de que te gustan esos filmes, que trabajas y tienes experiencia, y pues te dan el trabajo.
La primera pelicula de Gojira es una metáfora sobre el holocausto atómico, y ya los filmes posteriores han sido aventuras de monstruos gigantescos. ¿Ahora en qué punto se encuentran los filmes de Godzilla y cuál considera que sea su significado para Japón y el mundo?
Más que Japón, es el público extranjero el que permite que Godzilla reviva en ocasiones. Puedo decirte que directores, técnicos, todo el crew de cada película de Godzilla es más conocido y aplaudido en el extranjero que en Japón. Por eso es que salimos a otras partes del mundo, con toda la gente que valora nuestro trabajo, para cargarnos de energía y volver con las pilas necesarias para continuar trabajando en estos filmes en Japón. Allá, un problema fuerte es que el público japonés no expresa sus emociones. La gente en el extranjero, en cambio, ve un filme de Godzilla y grita y chifla y aplaude, pero en Japón están estáticos.
¿Qué opinión tiene del último filme de Godzilla que se realizó en EU (Godzilla, Gareth Edwards, 2014), y cómo lo tomaron en Japón?
Lo único que te puedo decir es que qué envidia de producción. Porque están en Hawaii, luego en Canadá, luego en Estados Unidos. Y pues cualquier director puede envidiar un presupuesto que te permita tener todas esas locaciones. Y bueno hasta con los actores: ese filme tiene un importante actor japonés llamado Ken Watanabe; pero te aseguro que si el filme hubiera sido en Japón, él no habría participado en un filme de Godzilla japonés.
¿Ahorita cómo se tiene considerado el kaiju en Japón? ¿Cuál es su importancia o trascendencia?
Realmente ha cambiado mucho la situación de los kaiju en Japón. Habían dejado de ser populares, pero gracias a estas grandes producciones (La Godzilla estadunidense, y filmes como Pacific Rim, de Guillermo del Toro), ahora se filmará un nuevo Godzilla en Japón, que dirigirá uno de mis amigos.
*FOTO: Godzilla se ha mantenido por décadas como parte de la identidad fílmica de Japón. /Especial.
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